Conversaciones de verano: youtubers
Surge la curiosidad. Y lo hace en una conversación de verano, en una terraza en el paseo de una impresionante playa, muy cerquita de casa. Charlamos relajados, de forma natural. Amigos y familiares compartimos tema de conversación en un ámbito de fondo que me apasiona: La comunicación. Y más concretamente el fenómeno de los youtubers. Y de la conversación de verano surgen las ganas de saber más. De indagar. De explorar algo más sobre el fenómeno, y quizá sacar provecho del trabajo de investigación. No más de una hora de trabajo.
La conversación en la terraza del paseo marca el principio. Un familiar menciona un espacio en Madrid, Sala de Máquinas. Un lugar para transformar. Para pensar. Para desarrollar. Y sin querer, su siguiente frase genera en mi un interés mayor al de la propia conversación. “El otro día una reconocida marca convocó en Sala de Máquinas a tres youtubers para presentar su nuevo producto”. Se me enciende la bombilla. Quizá aquí, en Euskal Herria, aún no estemos preparados para dar el salto. Pero me marco un reto. Este curso, desde la empresa a la que pertenezco, Arteman, y más concretamente, en la gestión de alguna de las marcas a las que prestamos servicio, convocaremos a youtubers para alguna de nuestras presentaciones.
¿Dónde han quedado las clásicas presentaciones ante los referentes periodísticos? ¿Ante los medios de comunicación convencionales? Antes los periodistas eran agasajados cuando acudían a una presentación. Ahora ya ni les llaman. Quizá dichas presentaciones clásicas serán un fenómeno vintage en menos que cante un gallo. Sin ninguna duda, seguimos viviendo una enorme revolución. Y a todos, pero sobre todo a los que nos movemos en este mundo, nos está tocando adaptarnos a nuevas tendencias prácticamente cada día.
Sin despistarme del hilo principal del artículo, y tras la amena conversación de la terraza de verano, asalto la red. Y me pongo a buscar. Comienzo por las palabras clave y por los términos más interesantes. Branded Content, Youtubers, influencers, celebridades, famosos… y comienzo a recibir muchísima información. Pronto encuentro los rankings de los youtubers más seguidos, salen los nombres y las referencias de los principales youtubers del Estado (Pewdiepie con 53 millones de seguidores, HolaSoyGerman con 30 millones o elrubiusOMG con 22 millones). Y también alguna referencia de mi ámbito más cercano. En Euskal Herria también tenemos youtubers, aunque en euskera aún estamos lejos de los grandes números. Por desgracia constato que AdSense, el sistema de publicidad creado por google no contabiliza ni monetariza los contenidos en euskera. AdSense no identifica el euskera y por consiguiente no añade publicidad al vídeo. Entiendo que ésta es una losa demasiado grande para el despegue de los youtubers euskaldunes y deseo que mis hijos no encuentren dicha carga en un cercanísimo futuro.
Hoy podemos hablar de más de un millón de youtubers en más de 30 países. Entre los que se encuentran algunos de nuestro ámbito que generan contenido en castellano como la vitoriana Sara Baceiredo (visualizaciones superiores a los 200 mil por vídeo); Telmo Trenado, con datos interesantísimos de seguimiento, o en youtubers euskaldunes como Aiora Probatxoa, con vídeos que alcanzan las cuatro mil visualizaciones.
Respecto a la definición de dicho fenómeno debo reconocer que algunos comentarios me convencen más que otros. Y destaco en estas líneas algunos de ellos: “Los youtubers ofrecen a las marcas nuevas formas de contactar con sus audiencias”; “la relación de los youtubers con sus audiencias es muy especial y es su principal activo. Es una relación basada en la confianza, la cercanía y la creatividad”; “Nos encontramos ante un paradigma relacional entre marca y usuario. Relaciones basadas en valores emocionales, de cercanía y de reciprociedad”. Reviso algunos de los vídeos de estos generadores de contenidos en formato audiovisual y lo cierto es que me llevo una enorme decepción, aunque entiendo que quizá ya estoy mayor para entender el tono de algunos vídeos. Los expertos hablan de “historias contadas de forma honesta, humana y natural”, y en algunos casos no me lo parece. Aún así sigo interesado.
Me interesa el fondo y me atrae el formato. Entiendo que para algunas marcas es una solución muy práctica e interesante ya que cada uno de los youtubers tiene un perfil muy definido y por lo tanto, también unos seguidores con unas características muy concretas y muy bien identificados. Estoy convencido de que durante este ejercicio desde Arteman nos lanzaremos a una presentación al estilo del celebrado en Sala de Máquinas.
Es lo que da una conversación de verano. Una terraza en un lugar que me encanta, agradable compañía, buen tiempo y no más de una cerveza, por si acaso.